— Dime
algo...al oído — le pedí.
— ¿Por
qué?, ¿Para qué?, ¿Por cuál motivo? — interrogó.
— Quiero
saber qué sensación provoca tu voz en mí — contesté.
Pensó, dudó, actuó.
— Hola
— simplemente susurró.
En ese
instante, transformó mi mundo.
— ¿Qué
sentiste? — volvió a interrogar.
— Nada,
que pueda explicar.
— ¡Y
entonces!
— Solo
puedo decir: me siento más enamorada.
DAYANA
RADA
No hay comentarios:
Publicar un comentario